Somos todos o ninguno, ese es nuestro espíritu, el lema de esta revista semanal.
Nuestro vientre es Twitter, allí nacimos, aprendimos y nos conocimos. Nuestras palabras crearon lazos, nuestras manos nos inventaron y quisimos más. Fue un muro de Facebook el que nos hizo ilusionarnos, hablarnos e incluso de tan lejos, querernos. Son nuestras ansias de querer más de nosotros las que nos traen aquí, porque escribir es un consuelo, un ejercicio vital, una forma de vivir, de olvidar, de gritar y de llorar, pero sobre todo de reír y de estar cada día más cerca.
La generación del Tuit y aquí orgullosos levantamos la cabeza para que nos escribas, para que nos leas, para seguir descubriendo.
Está la que miraba por la ventana de México a Argentina, el que alargaba el brazo de Ecuador a España, la que soñaba con un lugar más allá de sus raíces, la olvidada, los sin patria, los que guardan las lágrimas. La mujer que siente que el fin del verano pasó hace mucho tiempo, los que aún llevan inviernos pasados creciendo por dentro. La mujer que amamanta la vida y el cobarde que se aferra al destino. La que de Asia porta la sangre y en Colombia lucha para que no la obliguen a olvidarlo. El niño que llora en un rincón porque nadie juega a su juego o el joven que busca consuelo en senos ajenos. El que grita libertad y la que llora porque le aprietan demasiado las cadenas. Los locos y los cuerdos, escritores de medio pelo. El que dibuja con sonrisas la vida y el que nos llena de abrazos y besos. Está la que canta con un violín y el que lleva el piano tatuado en el recuerdo. Los que luchan, los que se rinden. Ganadores y perdedores. Están los que siguen soñando con los ojos abiertos y los que se están dando cuenta que mueren por dentro. La que grita a su soledad entre libros y besos, el que deja pasar el tren y los deseos. Los que viven porque escriben y los que escriben ya muertos. La que llora por su país o los que sienten que este no era su tiempo.
Somos tú, yo, él y ellos, pero sobre todo somos nosotros, los que luchamos para seguir conociendo.
Simplemente somos únicos, como todos.
Julio Muñoz
¡Somos groupies!
:D