martes, 5 de junio de 2012

origami

sus palabras son viento
taladran              oídos
rasguñan            nubes
congelan             soles

piensa en la distancia
se la imagina
la viste de papel
hace                origami

no resiste la lluvia
(sus palabras son viento)
dos renglones más
punto                  final

Astillas





Se dice que el Haiku habla de lo que sucede en este lugar, en este momento...




Esquirlas de luz
se inscrustan en mis sueños
cuando amanece.




Hay un abismo
de sombras citadinas
que nos envuelven.




La sombra cae
como un cristal quebrado
sobre la tarde.










Del lado conocido







No estoy preparada para morir, y de estarlo, sé que no me animaría. Una cosa es prepararse sicológicamente para un evento importante, comprarse un traje e inventarse desde un peinado diferente hasta una nueva forma de caminar. Pero ir hacia la muerte es otra cosa. No he experimentado la eternidad, o al menos no de una manera consciente, no sé cómo manejarla, aunque si la eternidad existe yo me quiero ir al paraíso. Sin embargo, el cordel de la supervivencia me sigue manteniendo aquí, del lado conocido.

Caos




Y nos encontramos  bajo el sonido de una misma voz,
con restos de tinta y notas entre los dedos,
y algunas palabras  bailando al filo de una mentira.


Una puerta abre el horizonte 
disfrazado de piernas aladas.
Un río de murmullos se agita en las entrañas,
y los días y las noches 
tienen un nuevo ímpetu.




Toda una vida 
danza 
frente a los ojos.


Caos.


Espaldas erizadas 
arañandose 
entre los pliegues de la noche
y las horas avanzan  mordaces 
como viento frío.


Las miradas se ahogan en deseo rojo y saliva,
piel vibrante, pechos erguidos, 
erecciones embravecidas,
parpadeos furtivos, 
olas  de lenguas 
disfrutando el paladar.


Con manos temblorosas dibujando un mapa 
en la curva del vientre,
susurros de lluvia blanca y lechosa 
buscando el fin del viaje. 
Con sonrisas mordidas 
y ojos llenos de ambición
una boca se agita encendida.


Y un vaivén de mareas, ondula los cuerpos
el tiempo se detiene en cada embestida,
se estremece en el arco de la espalda;
sembrando en la piel
una maraña de promesas 
y de abrazos 
llenos de lunas.


El mundo se repliega en cuatro esquinas
una voz se desnuda entre gemidos de guitarra,
páginas de otoño y vientos agitando las alas.


Aquí, donde todo y nada existe.


Alma E. Palma.

Me voy

Me voy pero no te preocupes, si prestas atención por las noches oirás los ecos de los latidos que una vez fueron y ahora son recuerdo. Recuerda que una vez amé hasta tu forma de reír en los sueños, y que un día soñé tu amor y el mío venciendo al tiempo. Recuerda, recuerdo. Recuérdame en las tardes de mayo, cuando me nombre el viento.
Ten lo que queda, la ceniza me mancha los dedos. Sigue tus pasos que yo me regreso, tu camino no es mi camino, recorren distintos cielos.

Un sueño

Un sueño, 2006. Técnica: pastel.


Abismos


Él tenía unos ojos de abismo en los que ella caía. Ella era el abismo
en el que él caía todos los días.

Ella sabía que él era un vicio que tenía prohibido. Él la tomaba por
sentir que sin ella nada tenía sentido.

Un día al final del verano, ella lo vio partir. No era la primera vez
que se iba, pero era la última que lo vería ir.

Su espalda ya cortaba la línea del horizonte. Sabía que no quería
partir, con todo su corazón de hombre.

Aferrada al picaporte, ella lo miraba alejarse. Más que irse con él,
quería que él se quedase.

No volvieron a mirarse. No hubo más caídas ni recuerdos de caídas.
Ella lo dejó marcharse y él no intentó regresarse.

La suma de dos abismos no hacen uno sólo más grande. Cuando es amor
imposible, es el mismo abismo de dos, sin una razón que mande.

Mientras dure...


Mientras dure el alba, 
no habrá oscuridad 
que nos espante, 
ni engaños
que nos levante.

Mientras dure el fuego,
no habrá ningún frío
que nos impugne,
ni miedos
que nos abrume.

Mientras dure el día,
no habrá quién se vaya,
no habrá lamentos,
ni nada
de sufrimientos.

Mientras dure esto,
esto que yo siento,
bésame ahora,
y dime
quién te enamora.


Omer Alfcorbar



Y lloro, y me ahogo, y me despierto.



Todos los días muero en silencio porque te vas, porque no te veo. 
Todos los muertos me reciben entre ruido, porque eres estruendo. 
Y lloro, y me ahogo, y me despierto. 
Las sábanas aún recuerdan tu olor, ondean sus arrugas hacia tu cuerpo. 
Las mañanas son oscuras sin tus besos, cálidos, húmedos, llenos de incienso. 
Y lloro, y me ahogo, y me despierto. 
Porque el porqué eres tú cuando me lamento; entre humo, entre botellas, entre recuerdos. 
Porque tú fuiste mi será, mi fuimos, mi seremos; entre risas, entre miradas, entre tequieros. 
Y lloro, y me ahogo, y me despierto. 
Cuando un sueño es la realidad solo nos queda cerrar los ojos y soñar. 
Cuando hiciste de mi mundo la melodía de un piano y solo me quedó escuchar. 
Y lloro, y me ahogo, y me despierto. 
Deja que la mañana lleve tus restos al fondo de mi cerebro para que vuelvas a los sueños. 
Deja que la araña teja un muro lleno de lamentos. 
Y lloro, y me ahogo, y me despierto. 

Julio Muñoz

Tweet Ilustrado - Elegir


Tweet Ilustrado - Ayer


En un segundo

Cómo hacer para entender?
Que a veces me busques la boca
Me arranques la ropa
Me entibies el alma
Me roces la piel

Y
En
Un
Segundo

Te olvides mi nombre
Me pintes de otoño
Te alejes (again)

Cómo hacer para entender?
Que a veces me apagues la magia
Me quiebres la risa
Te vuelvas silencio
Me mires sin ver

Y
En
Un
Segundo

Me abraces las ganas
Me calmes los miedos
Te acerques (again)

Cómo hacer para entender?
Que somos amigos
Que somos olvido
Que somos un sueño
(despierto… dormido…)
A veces de soles
A veces de frío

Y
cómo
hacer?

Para decirte: no vuelvas
Para decirte: volvé
Sin sentir que me duele
cada palabra que digo
y que no pronuncié.

Cómo hacer(lo)
No sé

Luna desde el cielo



La luna sin horizontes. Sin tierra de por medio.
A muchos kilómetros de altitud, así veo enfrentarse luna y ocaso.
La luna ganó toda la noche.

Ana R.

Días de luna


Tengo tus noches,
inspiro tus mareas,
también tus días.

Te dejas llevar,
en mis fases te siento,
llenas pasiones.

Arden sonrisas,
sueños crecientes,
insomnios menguantes.


Ana R.

Soledad

La soledad más que un estado es un sentimiento
es ese momento en que evitas
compartir lo que llevas dentro,
no por egoísmo mas bien por temor,
de que nadie comparta lo que hay en tu corazón
soledad es eso, es ese vacío que
nadie consigue llenar, pues es un sentimiento
con el que uno mismo debe terminar.

Camille
@Proud_Hika

Conejo en brazos


Nurbia
@nurbia_deya

El reflejo

Un ángel quiso ser
Profundo sueño
Siguió los vientos
Brisas de nostalgia
Aires de recuerdo

Un ángel pudo ser
En este sueño
Un incienso conocido
fresias frescas
Siguió en su vuelo

Alas de mujer
Mujer eterna en este sueño
Se alejaba del cielo
Y pudo ver aquel banco viejo
Intacto el anden
Glorioso el momento
Aquí nadie pudo corromper
Sus más dulces anhelos

Otoño de sueño
No dejaba de sorprender
El calido sol en su cuerpo
Sentía al alma vivir
Con los ojos en el reflejo
Tan puro como miel
Brillante, verdadero.

El miedo y el dolor
Efímeros cayeron
Al suspiro piadoso
Del ángel en su sueño
Mujer eterna pudo ser
Al ver sus ojos y el reflejo.

Tati
@m_maraia
http://matildeyelmago.blogspot.com

Bailarina de juguetes y recuerdos


Ella baila sola, brillante por la vida
En compañía… pero en soledad
Esta cansada de las escondidas
Afronta cualquier tempestad

Es un principio de incertidumbre
Un alma que no encuentra su par
Siempre tan llena de mansedumbre
Atesora demasía de amor para dar

Es un proverbio chino en excelencia
Algunas veces con mucho para enseñar
Experiencias le han donado sabiduría
Pero su corazón la lleva a callar

La fortaleza es parte de su rutina
Es un corazón lastimado por aprender
Muchas rosas le han clavado espinas
Y el dolor no pudo cambiar su parecer

Sus juguetes están solos en una pieza
Los dejó prometiendo algún día volver
No tuvo la culpa de ser elegida
A crecer de golpe por su madurez

Tiene pendientes añoranzas todavía
Dispuesta a soñar, entre besos y un café
Recuerda siempre personas queridas
Que con el tiempo ha dejado de ver

Ella es un encantamiento de magia
Con su hechizo destruye el más duro metal
Se eleva, piensa y recuerda nostalgias
Entre sus misterios se ve su amabilidad

Ella baila sola, brillante por la vida
En compañía pero en soledad
Esta cansada, aún esta dormida
Pero algún día verá su despertar

El Taxista Sentimental
@taxisentimental
http://eltaxistasentimental.blogspot.com

Feu



Cuando nos habíamos ya alejado del bosque y nos guarecimos dentro de la cueva, ella echó sobre el piso las cosas que había ido recogiendo por el camino. Puso entonces dos o tres cortezas de tronco sobre un manojo de hierba seca, tomó dos palillos y los empezó a frotar entre las manos, con movimientos de espiral desde arriba y hacia abajo, rápidamente, una y otra vez, una y otra vez. Yo miraba sin entender qué hacía. Poco después percibí que un llama diminuta brotaba por entre la hierba, mientras una delgada columna de humo empezaba a velarle los ojos. Me miró con aire de superioridad y levantó las cejas, tentándome. Cuando sentí la quemazón en el dedo, tras ponerlo en una brasa, quedé boquiabierto y temblé, aterrorizado. Su fuego era cierto. Tomó una ramita y capturó un poco de éste en la punta. Lo fue acercando a mis ojos, que bizqueaban. Me lancé al piso y la tomé de los pies (algo gruñí, seguramente). Ella me apartó riendo dejándome ver sus desnudos y púberes pechos; volvió a señalarme la pequeña hoguera, el lugar de su fuego. Entonces levanté la cara y cerré los ojos ante ella, en señal de enorme respeto.

Click. La tapa de su encendedor cae bruscamente. Con un soplo delicado ella deshace la voluta azul del Cartier Vendôme mentolado que acaba de prender, impregnando el filtro de rouge oscuro. Entrecierro los ojos por el dolor de haberme quedado mirando fijamente la llama. Ahora el humo sube delante de sus ojos mientras levanta la copa de champagne hacia su boca. ¿Y ahora por qué me miras así?... ¿acaso te doy miedo?, me pregunta, entre risueña y maliciosa. Nada. Un déja-vu o algo así. Un déjà vu, le digo, mientras las puntas de mis dedos empiezan a erizarle, entre devotos y agradecidos, la piel de su bellísimo cuello.

Carlos Barrientos
@cbg36